jueves, 28 de febrero de 2013

¡QUIERO MÁS BOTOX!

La idea de esta entrada surge a partir de un programa que vi hace unos días en televisión. En éste aparecía una mujer gritando a pleno pulmón ¡¡que viva el bótox!! Ante lo cual, el reportero le pregunta, pero ¿usted sabe lo que es la toxina botulínica?, ¿sabe qué problemas puede tener si no se aplica correctamente? Como podéis imaginar la respuesta ante estas dos preguntas fue la misma: NO, ni me importa mientras me vea guapa. Ante esto se me ocurrió la idea de escribir este post, no con la idea de convencer a nadie sobre si debe o no utilizar bótox, sino simplemente por aportar un poco de información sobre ¡¡la toxina bacteriana más potente que se conoce!!

Aunque se utiliza el nombre "botox" de forma genérica, no es la sustancia en sí, sino una marca comercial de un producto formado por toxina botulínica diluida, muy utilizado en medicina estética con el fin de eliminar las arrugas y hacer que la cara presente un aspecto más joven. Pero este no es el tema a tratar aquí así que...¡vamos al lío!
Células y esporas de Clostridium botulinum
 
La toxina botulínica (componente principal del bótox) es una neurotoxina producida por Clostridium botulinum, una bacteria Gram positiva, anaerobia estricta, que tiene la capacidad de formar esporas termoestables (soportan hasta 120oC) las cuales permiten a la bacteria sobrevivir en ambientes desfavorables. La toxina, al igual que las esporas, es resistente al calor y sólo se inactiva si se calienta a 100oC durante al menos 10 minutos.  

Aunque actualmente se asocia la toxina botulínica con la medicina estética, parece que a muchos se les olvida la enfermedad que produce: el "botulismo", que se caracteriza por provocar una parálisis muscular (parálisis flácida) pudiendo llegar a ser mortal si afecta a los músculos respiratorios. Pese a que hay varios tipos de botulismo el más frecuente es el conocido como "botulismo alimentario", que se produce tras la ingestión de alimentos contaminados con la toxina. Estos alimentos suelen ser conservas caseras mal esterilizadas, las cuales proporcionan a las esporas de C. botulinum un ambiente favorable para germinar, multiplicarse y producir la toxina.
Botulismo. Aunque no lo parezca, la persona esta totalmente consciente. Vía: wikimedia

Por su mecanismo de acción la toxina botulínica se clasifica dentro de las "toxinas de tipo A-B", las cuales se caracterizan por estar formadas por dos componentes: 
  • Una cadena ligera (A) que tiene actividad proteasa intracelular. 
  • Una cadena pesada (B) que sirve para la unión a receptores específicos en la célula diana
Toxina botulínica. Vía: wikimedia

Al ingierir la neurotoxina, ésta se dirige, vía torrente sanguíneo, hacia  las terminaciones nerviosas colinérgicas periféricas, es decir, hacia aquellos axones terminales que están en estrecho contacto con el músculo. En este punto, la cadena pesada (B) de la toxina se une a receptores específicos en la membrana del terminal axónico presináptico y provoca la endocitosis de la toxina. Una vez en el endosoma, la cadena ligera (A) es capaz de liberarse y translocarse al citoplasma del terminal presináptico desde donde degradará el sistema de liberación de acetilcolina. De esta forma se impide la salida del neurotransmisor y por tanto se inhibe la contracción muscular, provocando la parálisis flácida que se observa en el botulismo. 

Mecanismo de acción de la toxina. Vía: Magnusmedicine


He de decir que a pesar de hablar aquí de una sola toxina, se conocen 8 tipos antigénicamente distintos que actúan sobre distintas proteínas del sistema de liberación de acetilcolina; pero para evitar complicar al lector he decidido hablar de la neurotoxina en general ya que, al fin y al cabo, el resultado final es el mismo.

Por último, vuelvo a repetir que este post no pretende convencer a nadie de que los tratamientos estéticos en los cuales se utiliza toxina botulínica son perjudiciales; simplemente quiero informar un poco de lo que es esta toxina, qué mecanismo de acción tiene, y por qué es tan importante utilizarla con cuidado y no tan a la ligera como se suele ver bastante a menudo.